Con las navidades a la vuelta de la esquina, es posible que estés planeando realizar algún viaje en familia. Cuando se viaja con niños o con personas mayores (los abuelos también pueden participar en la escapada) es muy importante llevar todo bien atado: excursiones, comidas, cambio de moneda si es necesario y, sobre todo, todo lo que toca a la salud, por si surge algún imprevisto

Consejos para proteger la salud en los viajes en familia

Antes de viajar, es importante informarse sobre todo lo que puede ser necesario en el lugar de destino para no llevarse sorpresas. Aquí tienes una lista de recomendaciones a tener en cuenta para viajar en familia protegiendo la salud:
• Conviene comprobar que el calendario vacunal infantil, de los niños está al día, es decir que los niños tienen puestas todas las vacunas que corresponden a su edad
• Nunca está de más llevar un pequeño botiquín de viaje, con un termómetro, antitérmicos y gasas.
• Es aconsejable contratar un seguro de asistencia sanitaria en el extranjero con alguna de las compañías que suelen elegir los viajeros experimentados, como Intermundial, Heymondo o IATI Seguros,que cuenta con un seguro que cubre a todos los miembros de una misma familia y al que puedes acceder con una oferta, gracias al descuento IATI que ofrecen muchos bloggers de viaje.
• Si se viaja al extranjero y el destino pertenece a la Unión Europea, conviene hacerse con la tarjeta sanitaria europea. Este documento, que permite recibir asistencia sanitaria en los hospitales públicos, se puede pedir en una oficina del Instituto Nacional dela Seguridad Social (INSS) o por Intenet en la Sede Electrónica de la Seguridad Social y tiene una validez de dos años. Tarda unos 10 días en llegar, así que si te corre prisa y cuentas con un sistema de identificación electrónica para hacer trámites con la administración, puedes descargar en el momento un certificado provisional sustitutorio (CPS) que puede tener una duración máxima de 90 días.
• Conviene consultar con tiempo si es necesario vacunarse frente a alguna enfermedad infecciosa y en el caso de que lo sea, pedir cita previa en un centro de vacunación internacional. En estos centros informan también sobre las medidas sanitarias que hay que seguir en los diferentes destinos respecto a la alimentación, protección frente a picaduras mosquitos, sol, altura, etc, pero también te aconsejo consultar la web de Recomendaciones de Viaje del Ministerio de Asuntos exteriores, que recopila información muy práctica sobre lo que hacer falta para viajar seguro a cada país: documentación vacunas, etc.
• Si en el destino puede haber mosquitos, es muy importante protegerse bien frente a las picaduras vistiendo prendas de manga larga de colores claros y calzado cerrado con calcetines, para evitar dejar partes del cuerpo expuestas, ya que las picaduras de mosquitos pueden transmitir algunas enfermedades infecciosas graves.
• Si alguno de los miembros de la familia sufre una enfermedad crónica, conviene llevar informes actualizados del médico, por si tuviera una recaída en el viaje y precisara asistencia sanitaria, y también la cantidad suficiente de medicación para los días de viaje. Aunque en España ya funciona la receta electrónica y puedes obtener tus medicamentos en otras comunidades autónomas, siempre es mejor ir preparado.
• Si el viaje es en avión, hay que tener en cuenta la diferencia de presión que se produce al cambiar de altura, tanto al despegar como al aterrizar, pues puede causar molestias en los oídos. Para prevenir esta molestia, conviene estimular la deglución, por ejemplo, mascando chicle o chupando un caramelo. En el caso de los bebés, como esto no es posible, la alternativa es darles el pecho o el biberón u ofrecerles el chupete para que succionen.
• Es mejor evitar los vuelos con escalas, pueden ser agotadores para los niños y las personas mayores.
• Si viajáis en coche, toma medidas para prevenir el mareo, que es más habitual en los niños, porque su órgano del equilibrio, situado en el laberinto del oído interno, no está del todo desarrollado y, además, viajan en el asiento trasero, donde es más difícil mirar a la carretera, y cuando son pequeños, en sentido contrario ala marcha. Hay que evitar iniciar el viaje justo después de comer, ventilar bien el coche y hacer paradas frecuentes.
• Para prevenir molestias intestinales e intoxicaciones alimentarias cuando se sale fuera del lugar de residencia, conviene tomar el agua embotellada y e incluso, si no está clara la salubridad del agua, evitar el hielo en las bebidas.
• Siempre hay que tener mucho cuidado con lo que se come cuando se viaja: es mejor no comprar en los puestos callejeros y hay que evitar tomar pescado crudo, por el riesgo de contraer anisakis, carne cruda y derivados lácteos no pasteurizados, (que podrían provocar listeriosis). También hay que tener especial cuidado con las salsas y los preparados que contengan huevo crudo, que pueden provocar salmonelosis.

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