Durante el embarazo se producen importantes cambios hormonales que afectan al organismo de la futura madre, incluso antes de saber qué espera un bebé. Estos cambios afectan a la piel, que se vuelve más luminosa y tersa, pero también más vulnerable a los factores ambientales (como el frío o la sequedad ambiental) y por tanto, más sensible.
Esta mayor sensibilidad provoca que tanto la piel como el cuero cabelludo se vuelvan más propensos a las reacciones alérgicas si no se utilizan productos cosméticos adecuados, libres de substancias químicas. Los cambios hormonales son a veces tan acusados que el tinte o la crema depilatoria de toda la vida habitual pueden causar reacción cuando nunca lo habían hecho. Por ello, por ejemplo, a la hora de teñirse el pelo en el embarazo, aunque se use el tinte de siempre, se aconseja probar antes qué efecto produce una pequeña muestra de tinte en una zona pequeña (por ejemplo, debajo de la oreja) para asegurarse de que no da reacción.
Por otro lado, en el embarazo no se puede usar cualquier producto cosmético porque los ingredientes pueden pasar a la sangre de la embarazada y llegar al feto. Por ejemplo, se desaconseja usar anticelulíticos con cafeína o tratamientos despigmentantes, porque no está claro el efecto que pueden tener en el futuro bebé.
Para evitar problemas y cuidar la piel de la embarazada como se merece, una buena opción en el embarazo es comprar cosmética natural elaborada a base de substancias no tóxicas, que además respetan el medio ambiente y los animales. En el embarazo, lo ideal es optar por cosméticos hipoalergénicos lo más naturales posibles.
Beneficios de la cosmética natural en el embarazo
- Los productos de cosmética natural son hipoalergénicos ya que no llevan filtros químicos ni componentes ácidos o alcalinos que puedan alterar el pH de la piel y el cabello e irritarlos.
- Como los productos de cosmética natural están elaborados con ingredientes naturales o de origen natural, derivados de plantas y materias primas renovables, a base de fórmulas suaves, son muy bien tolerados por la piel por lo que resultan ideales para tratar dermatitis, rosácea o acné, un problema que curiosamente a veces aparece en el embrazo.
- Los ingredientes de los productos de cosmética natural, como los aceites naturales -de argán, almendras, etc.-, la manteca de karité o las hojas de alcachofa tienen propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y descongestionantes muy beneficiosas para la piel.
- La oferta de productos de cosmética natural es muy amplia. Por ejemplo, hay una gran variedad de cremas, lociones o aceites que ayudan a mantener la elasticidad de la piel y prevenir así las estrías del embarazo, que aparecen en la tripa (y a veces también en el pecho, los muslos y las nalgas) cuando la capa superficial de la piel se estira de forma muy rápida y se “rompe”.
- La cosmética natural también es ideal para la piel del bebé, otra etapa de la vida en la que también es fundamental elegir cosméticos hipoalergénicos lo más naturales posibles.
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