La virulencia inicial del Covid-19 y la falta de datos sobre la evolución del virus provocó que, inicialmente, se tomaran medidas muy estrictas con las embarazadas afectadas por Covid-19 (como impedir la presencia de un acompañante en el parto), que fueron suavizándose a medida que se avanzaba en el conocimiento del virus y se mejoraban los medios para prevenir el contagio. Aunque por su condición, las embarazadas siguen formando parte de los grupos de riesgo por el principio de precaución, ahora sabemos que el riesgo de contagio de Covid-19 de la embarazada al feto es muy bajo.
Así se ha demostrado en una revisión sistemática de 49 estudios sobre el embarazo y el covid-19 realizada por expertos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Nottingham, que se ha publicado en BJOG: An International Journal of Obstetrics and Gynaecology
El parto con cesárea no está justificado en las embarazadas con Covid-19
El objetivo de la revisión era comprobar si estaban justificadas las medidas que se tomaron inicialmente para las embarazadas con Covid-19: parto por cesárea, aislamiento estricto del recién nacido y la alimentación con fórmula en lugar de lactancia materna.
Para ello se analizaron 49 estudios que incluyen los datos sobre el parto y el estado de infección del bebé, de 666 recién nacidos y 655 embarazadas con Covid-19
- En 28 de los 666 bebés (el 4%) se confirmó la infección por COVID-19 postnatalmente.
- En los partos vaginales 291 mujeres) 8 bebés de 292 (2,7%) fueron positivos.
- En las cesáreas (364 mujeres) 20 bebés de 374 (5,3%) fueron positivos.
De estos 28 recién nacidos con COVID-19, 7 fueron amamantados, 3 alimentados con fórmula, 1 recibió leche materna extraída y en 17 recién nacidos no se informó el método de alimentación infantil.
Conclusiones: el riesgo de contagio de Covid-19 de la embarazada al feto es muy poco común
La primera conclusión es que la infección neonatal con COVID-19 es poco frecuente, es decir: el riesgo de contagio de Covid-19 de la embarazada al feto es muy poco común.
Respecto al tipo de parto, la tasa de infección no es mayor cuando el bebé nace vaginalmente, recibe lactancia materna o tiene contacto inmediato con su madre tras el parto.
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