Hacia los ocho-nueve meses, muchos bebés pasan por una fase en la que les cuesta mucho separarse de sus papás y manifiestan rechazo a los extraños. Esta reacción, que algunos expertos denominan angustia de la separación es normal. Aunque a unos bebés les afecta más que a otros, todos pasan de alguna manera por esta etapa de miedo hacia lo desconocido y sobre todo miedo a separarse de su madre o su padre.

Por qué surge la angustia de la separación

Los expertos piensan que la angustia de la separación surge en una fase en la que el bebé empieza a ser más consciente de las cosas. De repente se da cuenta de que sus padres se van y pueden no volver, y eso le asusta mucho y por eso rechaza sobre todo a las personas que no conoce bien.

Cuando ocurra, lo más importante es demostrar al bebé que aunque nos vayamos, siempre volvemos y para eso es necesario despedirse siempre, explicarle que nos vamos y que volveremos. No es bueno irse a escondidas, porque entonces el bebé se inquietará más.

Cómo ayudarle en superar los miedos

1 Lo primero de todo, no obligarle a estar con quien no quiere

El hecho de que ahora el bebé rechace a los desconocidos no significa que vaya a dejar de ser sociable. Hay que darle tiempo. Si no quiere que le cojan en brazos otras personas que no sean papá y mamá, no hay que insistir. Incluso las personas conocidas, pero que no ha visto últimamente (un tío, un amigo, etc.), pueden ponerle nervioso en esta etapa de miedos pasajeros

2 Darle libertad para explorar

Por otro lado, si ya gatea conviene empezar a darle libertad para recorr la casa y vaya adquiriendo confianza de explorar otros lugares él solo. Antes conviene acondicionarla para que retirar posibles peligros. Un truco es recorrerla nosotros también a gatas, para detectar cosas que puedan resultar peligrosas para un bebé –enchufes, rodapié suelto, etc).

3. Hazle saber que estás cerca

Si tienes que dejarle solo en una habitación, no pares de hablarle mientras te mueves por la casa para que sea que sigues cerca y vuelves pronto.

4. Intenta no dejarle en manos extrañas hasta que se le pase esta fase

Si el niño está pasando por esta fase, no es el mejor momento para iniciar la guardería o dejarle con una canguro. Pero a veces no queda otro remedio. Si tienes que dejarle al cuidado de otra persona, quédate un ratito con los dos para que vea que es alguien de tu confianza.

5. Despídete siempre

Despídete siempre y procura hacerlo con calma y cariño. Aunque estés nerviosa, intenta no mostrárselo. Si el niño te ve inquieto se inquietará más, si te ve tranquila, le transmitirás tu tranquilidad.

6. Ofrécele un objeto de consuelo

Si el bebé tiene un especial apego por un objeto (mantita, peluche, chupete…) ofréceselo cuando te marches para que le sirva de consuelo.  Los objetos de consuelo objeto de transición les ayuda a sentirse más seguros cuando tienen que separarse de sus papás.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Comparte si te gusta