A veces durante el parto, justo antes de que salga la cabecita del bebé, se realiza un pequeño corte en el periné (entre la vulva y el ano)  que luego hay que suturar con puntos, para ampliar la apertura vaginal. Esta intervención que no está exenta de polémica, porque la recuperación suele ser bastante molesta, se conoce con el nombre de episiotomía. ¿Cómo cuidar la herida que provoca? Repasamos los cuidados de la episiotomía.

El objetivo de la episiotomía es evitar el desgarro de los músculos vaginales. Pero como puede tener algunos efectos secundarios, hoy se suele dejar la decisión de hacerla o no en manos de la mujer. La mayoría de las episiotomías y desgarros leves cicatrizan bien y curan sin problemas en poco tiempo.

Cuándo está indicada la episiotomía

Lo ideal es  recurrir a la episiotomía cuando es necesario que el bebé salga rápido porque lo esté pasando mal.

La episiotomía NO se debe hacer de forma rutinaria y sin que esté indicada. En España, las tasas de episiotomía es todavía alta, a pesar de que muchos planes de parto dan la opción de elegir sobre este procedimiento médico. La OMS, en sus recomendaciones para el parto ,dice que la episiotomía debe usarse solo en casos extremos. .

Para prevenir la episiotomía, en los cursos de preparación al parto las matronas enseñan a preparar el periné a lo largo del embarazo con masajes de aceite de rosa de mosqueta y fortalecer el suelo pélvico con los ejercicios de Kegel.

Cuidados tras la episiotomía

La episiotomía deja una herida en una zona delicada y por ello precisa ciertos cuidados.

En el hospital te darán las indicaciones para cuidar la herida en casa. Para que evolucione bien es fundamental que sigas una buena higiene.

  • Es suficiente con lavar la zona de la herida con jabón neutro, un par de veces al día .El exceso de humedad puede macerar la herida y entorpecer la cicatrización.
  • Es mejor asearse en la ducha con un jabón de Ph neutro (similar al de la flora vaginal). El bidé con el agua retenida aumenta el riesgo de infección.
  • No conviene usar desinfectantes, ni antibióticos ni antisépticos, salvo que lo indique el médico por alguna razón.
  • Hay que intentar mantener la herida lo más seca posible y limpia de secreciones.
  • Es importante tener cuidado de secarla sin restregar, dando pequeños toques con una gasa. Si es posible, conviene dejar la zona al aire unos minutos.
  • Se recomienda usar ropa interior de algodón holgada que facilite la transpiración.
  • Hay que procurar no hacer esfuerzos grandes, ni  tampoco estar mucho de pie hasta que desaparezcan los puntos.
  • Habitualmente, los puntos se reabsorben y se desprenden solos pasados unos 15 días.
  • Pueden aparecer hematomas en la región del periné (desde la vagina hasta el ano), causados por la presión del bebé al nacer. Normalmente, se curan solos en pocas semanas.

Si hay hemorroides

En el posparto es habitual sufrir de hemorroides (pequeñas dilataciones de las venas que hay alrededor del ano).

Muchas mujeres ya las sufren durante el embarazo, especialmente en el tercer trimestre, a consecuencia de los cambios circulatorios y el peso del útero sobre la zona. Las hemorroides pueden empeorar con los esfuerzos del el parto y suelen verse agravados en el posparto porque es habitual sufrir estreñimiento, provocado por el miedo infundado a que se suelten los puntos de la episiotomía

Para aliviar las molestias de las hemorroides, conviene lavar la zona con agua fría (pero no con hielo, pues se podría quemar la piel) y seguir una dieta variada y rica en fibra.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Comparte si te gusta