Recientemente, una mujer ha dado a luz en el asiento trasero de un taxi, ayudada por su pareja. Normalmente, los partos en la calle, un taxi o en la propia casa, porque no da tiempo a llegar al hospital, son casos aislados y suelen ocurrir por desconocimiento y excesiva confianza. Por eso, es importante conocer bien los síntomas de parto para salir con tiempo suficiente, y también, por si acaso, qué hacer en un parto si no da tiempo a llegar al hospital. Una matrona con amplia experiencia en partos explica cómo actuar cuando parece que el nacimiento del bebé es inminente y no da tiempo a llegar al hospital.

Los partos en la calle son poco comunes

En España, los partos en la calle, un taxi o en la propia casa porque no da tiempo a llegar al hospital son casos aislados y rara vez se dan en las embarazadas primerizas. Lo que ocurre es que llaman mucho la atención y enseguida se convierten en noticia.

Con la ayuda de Gema Magdaleno del Rey, matrona de atención primaria de Madrid, que ha trabajado durante muchos años en el paritorio del Hospital la Paz, de Madrid, vamos a explicar por qué a veces los partos son tan rápidos y cómo actuar en estos casos.

Síntomas de parto

Normalmente, los partos no son tan rápidos y una vez que aparecen los primeros síntomas da tiempo de sobra a llegar al hospital, pero puede suceder que no sea así (básicamente por no saber identificar bien los síntomas de parto).

El síntoma de parto más común del inicio del parto son las contracciones del útero, que suelen producir dolores intensos e intermitentes, cada vez más frecuentes y fuertes. También es habitual que se rompa la bolsa de las aguas (en este caso, conviene ir al hospital cuanto antes porque existe riesgo de infección)y que aparezcan otros síntomas por los cambios que está experimentando el organismo, como sangrado, náuseas y vómitos, malestar o ganas de ir al baño.

La duración del parto

El parto suele durar varias horas, ya que para que el bebé pueda salir por el cuello del útero este tiene que dilatarse 10 centímetros. Las primeras contracciones, hasta que el cuello del útero se dilata unos 2-4 centímetros pueden ser muy irregulares en intensidad y duración. Hay mujeres que apenas las notan. Por eso, a veces es difícil saber en qué momento ha comenzado el parto y establecer cuánto dura de verdad.

Además, la duración de la dilatación depende de varios factores:

Normalmente, sobre todo si es el primer parto, desde que aparecen los primeros síntomas hasta que se produce el expulsivo (salida del bebé) hay tiempo suficiente para llegar al hospital.

Pero en raras ocasiones, el parto puede desarrollarse de forma más rápida. El riesgo de que ocurra esto aumenta en las mujeres que ya han tenido más hijos, en las adolescentes y en mujeres que se han pasado por una conización (extirpación parcial o total del cuello del útero).

También puede ocurrir que una mujer que no esté bien informada espere hasta el último momento para ir al hospital, a pesar de tener los síntomas (porque no conozca el mecanismo de las contracciones o no dé importancia a las pérdidas de líquido amniótico) o que una embarazada que ya ha tenido hijos se confíe pensando que el parto durará las mismas horas que el primero.

Qué hacer si no da tiempo a llegar al hospital

Si, por la razón que sea, la embarazada piensa que no le va a dar tiempo a llegar al hospital, lo primero que debe hacer es llamar por teléfono al 112 para pedir asistencia médica urgente y pedir ayuda en el entorno (si está sola, conviene que busque a alguien que pueda acompañarla).

En ningún caso es conveniente coger el coche. Si la embarazada ya va de camino al hospital y parece que el bebé va a nacer ya, es mejor parar para dar a luz con tranquilidad.

Conviene buscar un sitio cómodo y limpio donde tumbarse o colocarse en cuclillas, en la postura que resulte más cómoda, tomando precauciones para que el bebé no caiga al suelo cuando salga del cuerpo de la madre.

Si se nota un deseo intenso de empujar (es una sensación parecida a cuando se sienten ganas de ir al baño), solo hay que dejar que el cuerpo actúe por sí mismo. Hoy en día, además, a través del teléfono móvil, los expertos indican cómo proceder si todavía no ha llegado la asistencia médica.

El cordón y la placenta

Después de nacer, el bebé sigue unido a la madrea través del cordón umbilical. Lo más probable es que para entonces ya haya llegado el servicio de urgencias y los profesionales sanitarios puedan realizar el corte el cordón y ayudar a la madre a expulsar la placenta (fase de alumbramiento del parto). Si no fuera así, desde el servicio de urgencias indicarán por teléfono cómo actuar con el cordón umbilical y la placenta. No pasa nada si no se corta el cordón y sobre todo, nunca hay que forzar la salida de la placenta.

Cuidados del recién nacido

En cuanto sale el recién nacido hay que secarle bien y cubrirle con alguna toalla o ropa, para evitar que tenga frío. Si es posible, conviene colocarle sobre el pecho desnudo de la madre para darle calor y facilitar que comience a mamar (la succión propicia la contracción del útero y ayuda a reducir el sangrado). Además, este contacto temprano facilita el inicio de la lactancia. Si es posible, conviene también taparle la cabeza con un gorro, o una toalla. No hay que bañarle ni lavarle con agua, porque se enfriaría.

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