Cuando nació mi primer hijo, más de una vez me pregunté, pero «¿Por qué sigo teniendo tanta tripa después del parto? si prácticamente había vuelto a mi peso… Entonces, no sabía que hay varios factores que pueden influir en la recuperación de la figura y especialmente en la bajada de tripa tras el parto durante los primeros días, semanas e incluso meses.

¿Por que siguo teniendo tripa tras el parto?

Estas son algunas de las causas que pueden influir en que la tripa no baje tras el parto:

  • En el posparto es habitual sufrir retención de líquidos y esta retención se nota en todo el cuerpo
  • El útero, que durante el embarazo ha aumentado 500 veces su capacidad, tarda unas seis semanas en volver a su tamaño original, más o menos lo que duran los loquios y el puerperio.
  • Si el parto ha sido por cesárea, la tripa puede parecer aún más hinchada porque es habitual sufrir gases después de la intervención abdominal. Tienes más información en el post Cuidados después de la cesárea.
  • Los músculos abdominales pueden haberse debilitado con el esfuerzo del embarazo y va a ser necesario fortalecerlos para que la tripa se sujete como antes

Es más, hay ocasiones en las que méses después del embarazo, por mucho ejercicio y mucha dieta que se haga, la tripa no baja y parece como descolgada porque los músculos rectos del abdomen se han separado por un problema llamado diastasis abdominal del que hablo más adelante.

No hay que tener prisa en adelgazar: el cuerpo necesita tiempo para recuperarse del embarazo

Después de 9 meses viendo como la tripa crece y crece, cuando nace el bebé muchas mujeres están deseando recuperar la línea. Sin embargo, el posparto no es un buen momento para iniciar una dieta y mucho menos para emprender un programa intensivo de ejercicios.

Por un lado, tienes que alimentarte bien para recuperarse bien del esfuerzo del parto, estar fuerte para cuidar de tu hijo y producir la leche que el bebé necesita. Además, dar el pecho  ayuda a adelgazar, a largo plazo (al principio no se nota) por el desgaste de calorías que supone para la madre.

Con respecto al ejercicio, antes de ponerse a hacer deporte como loca hay que confirmar que el suelo pélvico está bien recuperado y fuerte. De lo contrario pueden surgir problemas importantes en un futuro, tanto de índole sexual como de incontinencia urianaria. Tienes más información en el post: Suelo pélvico: qué deportes evitar y cuáles ayudan a fortalecerlo.

Así que, como en todo, es mejor ir poco a poco y seguir siempre los consejos de la matrona que te atienda en el posparto. Despues de un embarazo, el cuerpo de la madre necesita tiempo para volver a la normalidad.

Tienes más información en el post Consejos para recuperar la figura en el embarazo

¿Por qué sigo teniendo tripa meses después del parto?

Si la tripa no ha remitido pasados unos meses, conviene revisar el estado de los músculos abdominales por si existiera un problema de diastasis abdominal.

Laa diástasis abdominal es la separación de los músculos rectos abdominales que  van paralelos a la línea alba (de arriba a abajo). La separación de los músculos se produce de forma natural en todos los embarazos a medida que crece el útero. Pero, después del parto lo habitual es que los músculos se vuelvan a aproximar. Cuando no ocurre así, se diagnostica diastasis abdominal.

Cómo saber si tienes diastasis abdominal

El fisioterapeuta Rafael Vicetto, especializado en ureginecología y creador del  tratamiento StopDiastasis, aconseja llevar a cabo esta prueba para confirmar la sospecha de diastasis: Túmbate boca arriba con las rodillas flexionadas y los pies apoyados en el suelo, coloca una mano en el ombligo y levanta  la cabeza. Si queda un espacio y los dedos se hunden, hay bastantes probabilidades de sufrir de diástasis abdominal. Obviamente, habrá que confirmar el diagnóstico con un especialista.

Cómo se corrige la diastasis

Además de impedir que baje la tripa, la diástasis abdominal  puede ocasionar alteraciones digestivas y problemas lumbarles.

Hoy en día, la diastasis se puede corregir con fisioterapia, mediante habitualmente ejercicios hipopresivos,  higiene postural, para evitar dañar la zona y a veces, el uso de una faja especial. Si esto no resulta efectivo se recurre a la cirugía abdominal. Tienes más información en el post Tratamiento de la diastasis abdominal

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Comparte si te gusta