Usar chupete tiene beneficios (tranquiliza al bebé y ayuda a reducir el riesgo de muerte súbita) pero también riesgos (por ejemplo,, puede interferir en la lactancia si se usa demasiado pronto y provocar malformaciones dentales si se sigue usando cuando el niño ya no es un bebé). Tienes más información en el artículo Beneficios en inconvenientes del chupete. Por ello es fundamental usarlo bien. Aquí tienes algunos consejos para elegir y usar el chupete.
Consejos para elegir y usar el chupete
La «Guía de seguridad de productos infantiles: productos potencialmente peligrosos, editada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad» ofrece estos consejos para elegir el chupete
- El chupete debe ser lo suficientemente sólido y resistente para no separarse partes pequeñas con las que el el bebé se pueda atragantar o asfixiar. No debe llevar pegatinas ni etiquetas.
- El escudo (base del chupete) debe tener agujeros de ventilación y debe ser lo suficientemente grande para que no quepa entero en la boca del bebé.
- Estos requisitos figuran en la norma europea EN 1400:2002 que deben cumplir todos los chupetes. Para asegurarte de que es así, compra siempre en establecimientos que den garantías.
- El material del chupete puede ser látex o silicona. La silicona se recomienda para los primeros meses porque se deforma menos. El látex es más flexible (y también más resistente) y se recomienda cuando salen los primeros dientes, aunque muchos bebés ya usan chupetes de látex desde el principio para no cambiar luego.
- La tetina puede ser anatómica (imita la forma del pezón), fisiológica (plana y simétrica, ejerce mínima presión sobre el paladar) o redonda o de cereza (tiene la misma forma desde cualquier lado). La elección de una u otra es cuestión de gustos, a veces hay que probar varios hasta dar con el que más le gusta al bebé y también es posible que haya que cambiarla conforme crezca el bebé
Consejos para usar el chupete
- Por seguridad, no debe colgar el chupete alrededor del cuello del niño. Los collares son peligrosos por el riesgo de estrangulación. En la mencionada guía, aconsejan sujetar el chupete con una cuerda corta y una pinza en la ropa del bebé, y quitarlos mientras el bebé esté durmiendo.
- Hay que procurar que el niño no dependa del chupete a todas horas y reservar su uso para momentos puntuales en los que pueda tener una mayor necesidad de succión o necesidad de relajarse, como el inicio del sueño.
- El chupete se puede estropear con el uso, por las babas, el contacto con la comida. Hay que sustituirlo si cambia la textura o si aparecen fisuras u otros signos de deterioro.
- Aunque el chupete ayuda al bebé a conciliar el sueño, no conviene ponérselo si se le cae mientras duerme porque le podemos crear un hábito que puede entorpecer la calidad del sueño.
- Mantener el chupete limpio. Las primeras veces conviene esterilizarlo, luego en general se puede lavar con agua y jabón. Nunca hay que limpiar el chupete con la propia saliva
- No se debe meter el chupete en azúcar, miel o soluciones dulces. Con ello crearíamos malos hábitos alimenticios, además del riesgo de caries.
- Evitar que su uso se prolongue cuando ya no son bebés. Tienes más información en el artículo 7 trucos para dejar el chupete sin traumas
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